Tras el anuncio del presidente de México, Enrique Peña Nieto, de las iniciativas de ley contra la infiltración del crimen y 32 policías únicas, Mauricio Merino, investigador del Centro de Investigación y Docencia Económicas (CIDE), destacó que la gran omisión política tiene que ver con el patrimonio del mandatario nacional.

“La gran omisión política tiene que ver con el patrimonio del presidente; entiendo que es bien complicado en un mensaje a la nación de esta envergadura que en efecto rediseña, replantea el curso del sexenio completo, referirse a este caso enojoso.

“Yo me quedé esperando eso, me parece que esto ha medrado en la confianza pública, ha minado la percepción que ya de suyo está bastante mal respecto a las instituciones públicas; ha contribuido a separar más a la sociedad del gobierno todo esto que ya se ha dicho hasta la saciedad, y me parece que es un punto que no debió de pasar inadvertido”.

Sin embargo, aunque esa parte fue la gran ausencia en el mensaje de Enrique Peña Nieto, Mauricio Merino celebra que el presidente haya hecho suyo la iniciativa para crear un Sistema Nacional Anticorrupción.

Para el investigador del CIDE, queda claro que avanzar en el Sistema Nacional Anticorrupción es una cosa muy concreta, se trata de decisiones muy puntuales las cuales se pueden implementar o comenzar a implementar efectivamente ya sobre la marcha.

Y aunque no se verán resultados en un plazo breve, si se podrá ver que las piezas institucionales que hoy están rotas, fragmentadas o debilitadas puedan empezar a armar un rompecabezas donde la impunidad vaya quedando cada vez más atrás.

Por otra parte, al investigador del CIDE le queda claro que se está culpando al federalismo, y en particular al municipalismo; indudablemente la debilidad del municipio ha sido una de las causas principales, no la única, de la crisis en México en cuestiones de seguridad.

“Así que en los mensajes iniciales del presidente lo que me queda claro es que sí va a haber una centralización muy fuerte, que la centralización está vinculada con la seguridad, y la idea de que es mejor tener una muy fuerte centralización policíaca es mejor que cualquier alternativa presentada antes.

“Y casi todas las medidas, la mayoría de ellas, de las 10 anunciadas tienen que ver con eso, con un proceso de centralización policíaca”.