Al participar en los trabajos de la Semana Nacional de Transparencia, organizada por el IFAI, el coordinador de la Red por la Rendición de Cuentas (RRC) señaló que las propuestas del IFAI son el “mínimo aceptable” que debe contener la legislación secundaria en transparencia.
Merino afirmó que están dadas las condiciones para que la nueva legislación tenga el mejor de los destinos, toda vez que hay un grupo de senadoras y senadores comprometidos con la transparencia, una sociedad civil activa en el tema y un Gobierno federal que recientemente asumió la presidencia de la Alianza para el Gobierno Abierto (AGA), con lo que se espera honre ese cargo permitiendo, auspiciando y empujando una magnífica legislación secundaria.
“Este tipo de iniciativas son las que confirman un liderazgo real, no un liderazgo formal otorgado en razón de la Ley o en razón de los nombramientos emitidos y recibidos, sino en función de la actuación personal de quienes encabezan las instituciones públicas”, subrayó Merino durante su participación en el panel Relación del nuevo IFAI con los órganos garantes de transparencia en las entidades federativas. Segunda instancia, poder de atracción y Sistema Nacional de Transparencia.
A su vez, la comisionada presidenta del IFAI, Ximena Puente de la Mora, moderadora del panel, comentó que los documentos entregados a las dos cámaras del Congreso de la Unión son resultado del trabajo conjunto del Instituto con organismos garantes de las entidades, organizaciones de la sociedad civil, y que los mismos deben constituirse en un piso mínimo para que de ahí se pueda partir en la elaboración de los primeros proyectos de leyes generales.
En su turno, Juan Manuel Portal Martínez, auditor superior de la Federación, expuso que el hecho de que el IFAI se constituya ahora en el eje sobre el que gire el acceso a la información pública, a nivel nacional, puede tener un efecto positivo, tanto que permitirá contar con las condiciones para unificar criterios, perspectivas y capacidades institucionales en los tres niveles de gobierno.
Asimismo, apuntó que las posibilidades de que el Instituto cuente con facultades de atracción y de que se convierta en una segunda instancia sobre resoluciones emitidas por órganos locales, ilustran la posibilidad de homologar y otorgar al ciudadano un mayor peso en los procesos de transparencia.
Rolando de Lassé, representante del presidente del Instituto Nacional de Administración Pública (INAP), habló, entre otros temas, de la facultad de atracción conferida al IFAI con la reforma constitucional, y apuntó que ésta resuelve un problema importantísimo, el cual tendrá que verse con cuidado, pues consideró que lo que se genera es una despresurización, en algunos casos, de los temas que se tratan en los organismos estatales.
Con relación al Sistema Nacional de Transparencia, indicó que éste ayudará a socializar los criterios orientadores y aquellos que sean obligatorios, que indiquen el camino a seguir a los órganos de transparencia local y a los sujetos obligados.
En el cierre del panel, Gregorio Castillo Porras, secretario técnico de la Facultad Latinoamericana de Ciencias Sociales (Flacso) México, aseguró que la relación entre el IFAI y los órganos garantes tendrá como distintivo el federalismo cooperativo, que procurará que no haya detrimento en las relaciones entre las partes.
Está relación, explicó, tiene tres aspectos fundamentales: El IFAI, como órgano revisor o de segunda instancia, que debe resolverse de fondo el asunto; la facultad de atracción, a favor del Instituto, deberá de resolverse cuando se trate de contradicción de criterios y cuando éste decida atraer y resolver, como única instancia superior, y el establecimiento de un Sistema Nacional de Transparencia, bajo una lógica de federalismo cooperativo.