Los resultados que arroja el Índice de Percepción de la Corrupción 2017 (CPI 2017), presentado por Transparencia Internacional, no son alentadores en cuanto a los esfuerzos que los países están haciendo para hacer frente a la corrupción. Las estadísticas muestran que la mayoría de los países evaluados han tenido muy poco progreso en las acciones que han implementado. Solo 56 de los 180 países evaluados con los componentes del Índice, obtuvieron resultados del 50 por ciento o más. Nueva Zelanda, Dinamarca y Finlandia se encuentran en los tres primeros lugares con mejor percepción, mientras que México cayó del lugar 123 al 135. Comparado con los países de la región, México se encuentra entre los países que obtuvieron 29 puntos del Índice junto con República Dominicana, Honduras y Paraguay. Colombia y Brasil están en el lugar 96, Argentina en el lugar 85  y Chile en el lugar 26. (Consulte aquí el índice)

Al ser un índice de percepción, se puede afirmar que el resultado que obtuvo México refleja la opinión de la sociedad que durante todo el año estuvo viviendo escándalos de corrupción millonarios a todos los niveles de gobierno. Basta mencionar el caso Odebrecht o los desvíos de recursos en los gobiernos de Chihuahua con César Duarte y Veracruz con Javier Duarte, así como el caso de Tomás Yarrington en Tamaulipas acusado de recibir sobornos del narco y que en meses pasados fue capturado en Italia. Estos ejemplos se suman a una larga lista de irregularidades y prácticas de opacidad que han contribuido a que la percepción sobre la corrupción en el país siga en ascenso.

El reto para las instancias que integran el Sistema Nacional Anticorrupción se vuelve aún mayor, pues además de impulsar las acciones necesarias para cambiar de fondo las prácticas para evitar que los actos de corrupción queden en la impunidad, deberán buscar estrategias para convencer a la sociedad  de que las estrategias que se están diseñando serán realmente efectivas. Será un largo proceso para que se ponga en marcha e ir cambiando la percepción al respecto. Esta tarea llevará mucho tiempo. Los resultados del CPI 2017 son una nueva llamada de atención para no bajar la guardia en esta agenda que afecta no solo la vida cotidiana de los mexicanos, sino su imagen a nivel mundial.

 Liliana Veloz Márquez
Directora Ejecutiva
Red por la Rendición de Cuentas