El Instituto Federal Electoral (IFE) alertó que la propuesta de reforma electoral que hoy comenzará a dictaminar el Senado contiene deficiencias que pondrían en riesgo las 20 elecciones locales y el proceso electoral federal del 2015.
En pleno, los 4 consejeros electorales que quedan en el IFE hicieron 6 observaciones a la propuesta que analizan los legisladores, entre las que destacan “imprecisiones y falta de claridad que puede vulnerar la certeza jurídica y política que ha caracterizado las elecciones federales de las últimas 2 décadas”.
El consejero presidente provisional del IFE, Benito Nacif Hernández, leyó el posicionamiento, según el cual la reforma propuesta -o el proyecto que se conoce- representará costos excesivos e innecesarios y no existe garantía de que podrán aplicarse los cambios para las elecciones del 2015.
Acompañaron a Nacif los consejeros María Marván Laborde, quien asumirá la presidencia rotativa y provisional este miércoles- Marco Antonio Baños Martínez y Lorenzo Córdova Vianello.
En el documento leído, pues no aceptaron cuestionamientos, los consejeros afirmaron que no fueron consultados y si bien manifestaron su respeto por el proceso legislativo, plantearon sus preocupaciones.
Las 6 preocupaciones generales expuestas por los consejeros electorales se encuentra el que con el cambio de denominación a la institución -a un Instituto Nacional de Elecciones- habrá “costos excesivos e innecesarios y generará confusión en el documento de identificación más utilizado, seguro y confiable con el que cuentan los mexicanos”.
Además “los costos de la administración electoral se incrementarán significativamente” y las modificaciones generarán “una concentración de facultades en el órgano electoral de tal magnitud que difícilmente habrá tiempo para su adecuada implementación en el Proceso Electoral Federal 2014-2015”.
“La falta de precisión respecto de las atribuciones de las autoridades electorales abrirá la puerta a una indeseable discrecionalidad y falta de certeza por todos los actores políticos.
“La falta de una clara división competencial entre los órganos electorales ponen en riesgo los 20 procesos electorales estatales y el Proceso Electoral Federal 2014.-2015.
Por último los consejeros insistieron en que todos los actores políticos deberían ser incluidos en una reforma electoral de tal dimensión pues de lo contrario se debilitan “las bases de las instituciones de la democracia”.
En su posicionamiento los integrantes del IFE pidieron al Congreso de la Unión cuidar la operación electoral y no ponerla en riesgo.
Fuente: El Universal
