Las escuelas de educación básica en México carecen de evaluaciones y por ende hay una nula regulación sobre la manera como llevan las clases, sobre el comportamiento del personal docente, así como en el desempeño de los alumnos.

Al carecer de instrumentos de revisión, no se evalúa la calidad de la enseñanza, dejando la tarea a los supervisores, quienes se limitan a cumplir roles administrativos sin lograr medir que se cumplan las disposiciones de la educación de calidad.

La Organización para la Cooperación y Desarrollo Económicos (OCDE) señaló que en México está “desdibujada” la evaluación de escuelas, de modo que es imposible saber el desempeño con el que operan los planteles.

Existe una tradición largamente establecida de supervisión del trabajo escolar por parte de supervisores y de otro personal externo a la escuela, pero su función se ha centrado principalmente en asegurar que las escuelas cumplan los reglamentos y otros trabajos administrativos”, criticó el organismo internacional.

Por tanto, en el libro Revisiones de la OCDE sobre la evaluación de la Educación en México recomendó establecer un sistema que examine la operación de las escuelas con indicadores precisos y confiables, a fin de que los profesores y alumnos tengan un mejor desempeño y el proceso de enseñanza-aprendizaje cumpla su objetivo.

De acuerdo con el organismo internacional, la evaluación externa a las escuelas es necesaria porque permite tener la certeza de que cumplen con las políticas, se acentúa el liderazgo del director y el personal adquiere un compromiso de mejorar su desempeño.

Sin embargo, en México esa evaluación de centros escolares prácticamente es inexistente y ello perjudica la operación de las escuelas, porque no hay manera de comprobar que funcionan bien y que cumplen con las disposiciones de la SEP.

Un claro ejemplo es el cumplimiento al pie de la letra del calendario escolar, en el que están claramente estipulados los días de suspensión de clases y que a veces no se respeta, porque cada plantel toma decisiones fuera del reglamento y eso nadie lo vigila, lo cual incluso fue perceptible este lunes 15 de septiembre, en el que era un día normal de actividades, pero las escuelas determinaron hacer puente y regresar hasta el miércoles 16, incumpliendo con ello el calendario fijado por la SEP sin que nadie reciba una sanción administrativa por esa falta.

Ante esas fallas, la OCDE recomendó a México “mejorar el papel y la función de los supervisores, introducir una evaluación más sistemática a nivel escuela, crear capacidad entre los directores, asegurar un mayor enfoque en la calidad del aprendizaje y de la enseñanza, proporcionar niveles más altos de autonomía para las escuelas, mejorar la evaluación de los líderes escolares y establecer líneas claras de responsabilidad”.

El equipo de revisión de la OCDE concluyó que “no existe un enfoque bien establecido y sistemático para la evaluación de las escuelas en México”, ya que el gobierno federal ha delegado a los estados la responsabilidad de la evaluación de las escuelas…

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