La Jornada publica que la Iglesia católica debe ser más transparente respecto a los casos de abusos sexuales a menores por parte de sus clérigos e imponer castigos justos por los mismos, exigió hoy el Comité sobre los Derechos del Niño de la ONU, ante el que desde hoy comparece el enviado del Vaticano ante Naciones Unidas.

Una de las integrantes del comité de la ONU, Sara De Jesús Oviedo Fierro, exigió al Vaticano más detalles sobre los casos de abuso y sobre las medidas exigidas previamente por dicho organismo de la ONU.

“¿Por qué no hacer un esfuerzo para ser más transparente?”, se preguntó la representante de la ONU.

Además, Oviedo criticó la falta de acción por parte de la Santa Sede en contra de quienes cometieron los abusos. “Los castigos que se impusieron no parecen reflejar la magnitud o alcance de los delitos”, afirmó.

Otra de las integrantes del comité criticó que las investigaciones sobre los abusos se haya llevado a cabo a menudo sólo dentro de la Iglesia y de forma estrictamente confidencial. “¿Por qué sólo se denuncian antes las autoridades judiciales unos pocos casos, por qué no se hacen públicos?”, preguntó Hiranthi Wijemanne, de Sri Lanka.

Por su parte, el enviado del Vaticano ante la ONU, el arzobispo Silvano Tomasi, aseguró que la Santa Sede lucha en todo el mundo de forma decidida contra el abuso sexual de los menores. “No hay justificación para ninguna forma de violencia o explotación de los niños”, dijo Tomasi.

“El resultado de los esfuerzos conjuntos de las iglesias locales y la Santa Sede supone un marco que, aplicado correctamente, ayudará a eliminar los casos de abusos sexuales a niños por parte del clero y otro personal de la Iglesia”, afirmó Tomasi.

El Vaticano firmó todos los acuerdos internacionales para la protección de los menores y los aplica de forma consecuente, entre ellos el protocolo de la lucha contra la prostitución y la pornografía infantil, agregó el nuncio apostólico.

El papa dispuso además la creación de la comisión para la protección de los menores de edad, explicó Tomasi. En ésta se propondrán medidas para garantizar la ayuda a víctimas de abusos. La Iglesia católica mantiene lo que ya dijo el papa Juan Pablo II: el Vaticano considera un delito y un “terrible pecado a los ojos de Dios” los abusos a menores por representantes de la Iglesia.

Según Tomasi, los abusos sexuales son un crimen que no tiene lugar de forma especiamente intensa en los círculos eclesiásticos: “Hay pederastas incluso en los grupos profesionales más respetados del mundo, entre ellos en el clero y otras profesiones eclesiales”.

En los últimos años, el Vaticano vivió un fuerte escándalo cuando se dio a conocer el gran número de abusos sexuales que sufrieron menores de edad por parte de sacerdotes y otros religiosos en las últimas décadas. En los últimos diez años se informó al Vaticano de 4 mil casos de abusos, aseguró a principios de 2012 el cardenal estadunidense William Joseph Levada.

En un escrito enviado al comité de la ONU en diciembre, la Santa Sede argumentó que no es responsable de las instituciones de la Iglesia o sus empleados en otros países. Además, el Vaticano no remitió los detalles sobre los crímenes y su forma de actuar contra ellos que le reclamaron los 18 expertos del comité.

El comité de la ONU considera que el Vaticano tiene una “responsabilidad moral” por lo ocurrido y criticaron que algunos religiosos no fueran apartados del servicio religioso a pesar de sus actos de abuso.

El comité evaluará hasta principios de febrero la forma en que la Iglesia abordó estas cuestiones y desarrollará posibles recomendaciones que publicará más tarde. En la comparecencia de hoy estuvieron presentes activistas que piden que se aclaren todos los casos y reclaman amplias indemnizaciones para los afectados.

El papa Francisco se refirió precisamente hoy a los “escándalos” que protagonizó la Iglesia católica en los últimos años, aunque sin citar directamente los abusos sexuales a menores…

Nota completa en: La Jornada