Aclaró que esto es así porque sólo contamos con la declaración patrimonial, mientras que la declaración de intereses es algo que está considerada, pero no de manera obligatoria para que se presente de manera sistemática; por lo menos a nivel federal se deja a cuando el funcionario tenga un conflicto de intereses tenga que acudir a su superior, quedando la duda de quién sería en el caso del presidente.
Agregó que en otros países se le da mayor peso a la declaración de intereses que a la patrimonial y en México carecemos de un instrumento, asimismo la patrimonial cuenta con un carencia bastante fuerte a nivel federal no hay una obligación de publicación, es más de una cuestión de libertad…